
1- En esta primera categoría que se me viene a la mente es de aquellos tipos que escupen gargajos o goma de mascar, también conocido coloquialmente como chicle, en el urinario. Acá el factor determinante es qué tanto ruido haces antes de soltar horrendo escupitajo, o en el caso del chicle, desde que distancia lo lances y atines al ya mencionado depósito de desechos líquidos. La característica principal de estas personas (si es que se les puede llamar así) es que son muy inseguros, carecieron en su momento del cariño de su madre, fueron golpeados febrilmente con un cabestro o en su defecto con un cable de luz o su equivalente natural: una extensión. Si sigues en este rumbo, serás como el asambleista Galo Lara.
2.- Hay los que en cambio se rebelan contra el sistema, los que hacen todo por llamar la atención, son unos transgresores en toda la extensión de la palabra, tienen tendencias homosexuales que pueden degenerar en crisis severas de travestismo. Estoy hablando, obviamente, de quienes rechazan el uso del urinario y van al inodoro como añorando querer hacerlo sentado. Podrías ser así:
3. Los que orinan en el inodoro pero no levantan la tapa. Estos caoticos individuos son unos frescos. No tienen respeto por los demás y tienden a ser un poco depresivos, les produce placer saber que alguien pueda llegar a sentarse en el inodoro, ignorando que en el asiento está manchado. Estos no tienen perdón de Dios, y morirán devorados por gallinazos. Si siguen así, serán como este personaje:
4. Los que entran al baño vociferando y ya se van sacando el pollo antes de llegar al urinario. Estos sin duda, reflejan arrogancia, estupidez y son seres muy básicos. Quieren ser vistos, ostentan para generar un buzz, hacerse un mito en el penumbroso mundo de los SSHH para que la gente le diga "vele, vele, vele!".
5. Los que orinan apuntándole al gargajo, chicle, papel higiénico, bolita de naftalina o trozo del desinfectante Torbi. Si eres uno de estos, eres un ganador. No te preocupes, tienes la vida arreglada, te ganarás el pozo acumulado y por tu elegancia no tendrás problemas con las chicas.